5/02/2009

TRABAJO DE ANALISIS SOBRE “INGERMINA O LAHIJA DE CALAMAR- JUAN JOSÉ NIETO”

Contexto Histórico

Pequeña Biografía de Juan José Nieto

Juan José Nieto nace el 24 de Junio de 1.804 en la Loma de la Puerta, Cibarco. Juan José era descendiente de una familia humilde – Benedicta Gil y Tomas Nieto- que ejercían el labor de fabricantes de mechas de algodón para velas. Constantemente hacían viajes a otros pueblos e inclusive a Cartagena para comercializar sus productos, hasta que terminaron por quedarse en Cartagena.

A la edad de los 20 años ejerció el oficio de escribiente del comerciante canario José Palacio y Ponce de León, con quienes pudo acceder al conocimiento informal y autodidacta a través de los libros facilitados por ellos. Luego se casaría con su hija – María Margarita- hecho que lo posiciono privilegiadamente por encima de su estirpe humilde y de este modo se vinculo con el tiempo profundamente a la política.

Juan José Nieto fue principalmente un hombre político y en los pocos espacios de distanciamiento ejerció la escritura, por ejemplo, en su exilio de algunos años en Jamaica fue que publicó su novela histórica Ingermina o la hija de Calamar, que es la novela que me corresponde analizar en este trabajo.

Nieto fue gobernador oficial de Cartagena el 22 de Julio de 1.851 y fue quién proclamo la abolición de la esclavitud el 1 de Enero de 1.852. Algo en lo que estuvo trabajando para exterminar con otro grupo de políticos. Uno de los grandes labores en su gobernación fue la de proponer la educación primaria totalmente gratuita. Políticamente era Santanderista y además llegó hacer líder de los masones.

Ingermina fue publicada en 1.844 en Jamaica,- Kingston- en su estancia por fuera de la nueva granada y esta novela fue la primera novela en lo que representaba la nueva granada y específicamente un primer relato histórico, novela histórica.

Contexto Histórico

El establecimiento del nuevo orden- La República- se basaba fundamentalmente, en la noción del matrimonio y la estructura familiar, y quiénes llevaban el control y organización de la construcción de la Nación eran los criollos letrados e intelectuales.

Y en la República se creo entonces el concepto de “ciudad letrada”, en esta estructura se abandona la periferia y las comunidades alejadas del conocimiento del idioma español, algunos damnificados en este proceso de clasificación eran los indígenas, negros, mujeres etc. Todos los pertenecientes al campo subalterno.

Y quienes tenían el poder a cargo eran los que hacían parte de las elites intelectuales.

A mitad del siglo XIX se presentaba el monumental desacuerdo ideológico entre las dos principales vertientes políticas, la liberal y conservadora.

Los liberales pretendían una apertura y la vinculación de ideas progresistas y de evolución, con miras hacia modelos extranjeros, principalmente hacia Europa, y la anhelada liberalidad y avance que se oponía radicalmente al imaginario construido por los conservadores, quiénes establecían el deseo de mantener el antiguo orden, cuyo fundamento estaba ligado a la Aristocracia, además de que la religión católica tuviera posición privilegiada manejando el sistema educativo, y los respectivos valores morales, sociales y culturales.

Todos los anteriores sucesos generaron la separación definitiva y clasificable de los conceptos importantes en la época-diferencias sociales, raciales etc.-estos conceptos eran los de civilización y barbarie.

La civilización era entendida a través de conceptos como el progreso, la ciudad, miradas hacia el modelo extranjero y lo principal que era la ciudad “letrada”, la civilización representando las ideas liberales de algún modo.

Por otro lado, en el concepto de barbarie cabían aquellos que promulgaban por mantener el antiguo modelo tradicional – conservador-, los que no poseían el dominio de la lengua y la escritura, como los negros y mujeres. Obviando unas contadas excepciones donde algunos pertenecientes a lo subalterno podían acceder a ese medio letrado y de participación política con la Nación. Como sería el caso de Juan José Nieto, hombre negro, perteneciente a una familia humilde y que logré sobresalir gracias a sus favorables dotes intelectuales y de la cooperación de otros individuos importantes y reconocidos en la época.

Estructura Narrativa

Ingermina o la hija de Calamaro fue publicada en el año 1844 en Jamaica – Kingston-, es importante resaltar que fue de las primeras novelas en abordar la novela histórica, en todas sus dimensiones. El narrador –heterodiegetico-nos cuenta la historia en principio de manera lineal, pero a lo largo de la trama son insertados dos relatos de algunos de los personajes, que ayudarán a ocupar espacios vacios en la historia. Por tanto, hay un juego constante con el tiempo, y solo al final del relato podemos encontrar esbozado el orden cronológico de los sucesos acaecidos en la historia.

Ingermina o la hija de Calamaro no solo tiene un gran acercamiento a la novela histórica, sino también al costumbrismo y romanticismo. Relacionando lo histórico-Romántico, como una añoranza -representada en algún personaje- a la independencia perdida, el valor de los rasgos culturales y de identidad pertenecientes a las culturas indígenas de la época, y en lo referente al costumbrismo, nos deja entrever las características sociales y culturales pertenecientes a las poblaciones de Calamar, Turbaco, Sinu y en términos generales todo el ancho mapa de aspectos que representan las comunidades indígenas en la época de la conquista. Antes de comenzar con el relato de la llegada del Español Pedro de Heredia, Juan José Nieto nos esboza las características de los calamareños, su ubicación geográfica, tradiciones-como la correría del amor y las ceremonias fúnebres-, divisiones de jerarquía –Cacique, mohanes, capahies, jadcadhies, entre muchas otras características que entran como manera de introducción para comprender claramente la historia a relatar.

Lo referido a lo histórico nos muestra un pasaje que literariamente fue silenciado, y Juan Jose Nieto nos permite tener un imaginario de lo ocurrido en 1.533 con la llegada decisiva por parte de los Españoles, y al parecer la historia de amor, entre Ingermina y Alonso de Heredia, pasa a un segundo plano cuando vemos en la historia el trato de los Castellanos para con los Indígenas, y relaciono este hecho con lo ocurrido en María de Jorge Isaac, porque también, en esta historia, hay una proyección de armonía en las relaciones entabladas entre el dominante y el dominado. El primero se ve como un ser civilizado, comprensivo y asequible a los deseos y perjurios del lado dominante, en este caso, el de los indígenas que fueron sometidos y aceptaron el proceso de a culturización que impusieron los españoles, - muestro en la novela- de manera muy pacifica y grata. Las anteriores características relacionadas entre la novela de Isaac y el de Nieto, demuestra también ese lazo entre el costumbrismo y el romanticismo.

Por parte del romanticismo, esta el perfil del héroe Romántico que lucha hasta último momento por preservar sus valores culturales, los de su raza y origen, por ejemplo en el personaje de Catarpa, que si bien es cierto, después de luchar arduamente por la liberación de su estirpe, tuvo que aceptar la condición ya establecida de dominación por parte de los castellanos en Cartagena, siempre mantuvo sus tradiciones culturales y de valores sagrados intactos, mientras que su hermanastra Ingermina, su padre y la gran parte de calamareños terminaron por aceptar la concepción de un solo Dios, omnipresente, y la necesidad del bautismo como símbolo de conversión a la religión católica.

Tema a resaltar en la novela “Ingermina o la hija de calamar”

Un tema que llamó mucho mi atención en la novela de Ingermina, es lo referente a la conducta indígena frente al proceso colonizador, porque en la novela se plantea una conciliación pacifica entre la dominación Española y la sumisión de los indígenas. Y aunque intente demostrarse n la novela a través de unos pocos personajes la rebeldía e inconformidad de la perdida de su independencia y cultura, casi todos los personajes correspondientes a los dominados (indígenas) aceptan resignadamente su sometimiento a manos de los Españoles, algo que me deja la duda, de si realmente esas fueron las actitudes históricas y la ficción esta desdibujando las voces de lucha y reivindicación por parte de los indígenas en 1.833.

El único personaje que a lo largo del relato se mantiene fiel a sus convicciones es Catarpa, personaje que llamo mucho mi atención, por ser considerado en la novela como un hombre simplemente rebelde, que contradice la postura de su padre el cacique de Calamar, y se marcha aisladamente para organizar un grupo que este en desacuerdo con aceptar la colonización y sometimiento, este personaje plantea que es preferible morir en batalla luchando a sangre por mantener vigentes los derechos de su propiedad, identidad y tradición. Escuchamos interesantes levantamientos discursivos por este personaje que es la encarnación del héroe romántico que hace valer su origen a toda costa, y no permitiendo aceptar pacíficamente su yugo ante los dominantes españoles.

Un aspecto importante, es que los indígenas son mostrados en la novela de un modo muy civilizado, es decir con una extrema organización política que hace ver una similitud hacia el mundo occidental, sobre todo por los rasgos de entablar acuerdos con los españoles para mantener su especie sin importar que estos sean esclavos en su propio territorio. Y por supuesto otro rasgo curioso, es que a excepción de unos pocos personajes españoles –Badillo y Peralta-los españoles son mostrados como seres tan superiores, correctos, virtuosos que prefieren utilizar el dialogo por encima de las armas y acometer fríamente crimines para mantener esa dominación hacia los indígenas. Pedro de Heredia y su hermano Alonso, son descritos como personas sencillas, nobles, y de buen sentimiento capaces de pasar por encima de los mandatos de poder para respetar sus valores y principios morales, sobre todo con respecto a la religión.

La pregunta sería, si realmente este modo idílico y de aparente armonía fue el que sucedió en el proceso de conquista y colonización española, si fue verdad la aparente sumisión por parte de los indígenas, y por el otro lado, la hospitalidad y generosidad por parte de los castellanos.

Esta novela histórica, de alguna manera aporta una visión bastante ficcional, de los sucesos ocurridos en la conquista, nos asume una perspectiva de perfección, de equilibrio, donde tanto en las relaciones - entre españoles e indígenas – como en las mismas relaciones afectivas, todo es resuelto de forma satisfactoria, todos los personajes encuentran la felicidad perdida a lo largo del relato, y en la última parte, nos dibuja claramente el destino de aquellos que siempre fueron virtuosos y dignos –ingermina, Alonso, Pedro de Heredia, Velázquez, Gámbora y la madre de Ingermina- y la eminente felicidad y prosperidad en la finalización del relato. Por otro lado, están aquellos bárbaros y criminales, que usaron el poder en pro de su propio beneficio, como Badillo y Peralta, y cada uno tuvo su destino que le hico pagar todas las injurias en contra del pueblo indígena y específicamente lo sucedido con los Castellanos héroes de la conquista – Pedro de Heredia y su hermano Alonso-.

4 comentarios:

Lola dijo...

El analisis esta de una forma informal muy completo, te felicito considero que el analisis sobre el libro de Nieto esta interesante, vistes puntos claves en la obra en mi humilde opinion. El libro en general es una pieza de arte,es entretenido y a la vez cuenta un poco de nuestra historia como pais. Lobo Estrepario gracias por estas lineas las disfrute mucho ...

rigoberto dijo...

Hola, mi nombre es Rigoberto Angelo Nieto Mendoza, quisiera saber donde puedo encontrar un ejemplar de esta y demas obras escritas por Juan José Nieto Gil, yo mantengo grado de consanguidad con el autor y estoy muy interesado en su legado para las futuras generaciones, ni correo es nieto.rigoberto@gmail.com

katita dijo...

MUY BUENO TU ANALISIS ME PERMITIO UBICARME MEJOR EN LA OBRA GRACIAS!!!!

Dianismar dijo...

Faltó un poco más de análisis, en especial en decir con toda seguridad que es novela histórica porque ese es un tema que aún hoy da de qué hablar, parece que hubiera sido la primera novela histórica Colombiana, pero es difícil clasificarla porque aun en esa época no se hablaba en Colombia de los géneros literarios. También faltó consultar en especial la biografía de Pedro de Heredia para saber que fue un conquistador cruel y déspota con los indígenas y con todo el que se le atravesara por el camino, toda esa reivindicación del español es pura ficción.

Igual es importante resaltar que esta obra no se lee nunca y hacer un trabajo sobre ella ayuda a que la gente se interese más.